Hace tiempo que surfeas y además tienes buenos recuerdos de olas épicas que disfrutaste desde el primer momento, pero algo falla en tu surf y no entiendes por qué.
Puede que ya no dispongas de tanto tiempo para poder ir a la playa y además los malos hábitos que adquirimos en una vida ocupada por el trabajo, son muy malos de eliminar y buscar tiempo para hacer un entrenamiento de surf fuera del agua se convierte en una tarea casi imposible. En este post, me gustaría contarte el por qué sí hay personas que aunque pasen los años sigue teniendo ese flow y esa facilidad para seguir pillando olas con un longboard casi sin esfuerzo.
Son los pequeños detalles los que hacen que esa técnica de surf no desaparezca nunca. Uno de esos detalles es lo más básico, la remada.
¿Alguna vez te has parado a pensar cómo remas, si lo estás haciendo de la forma adecuada o simplemente cómo reman los buenos riders?
A veces, la remada es algo tan sencillo y básico, que después de empezar a surfear y realizar los primeros giros en surf, la pasamos por alto. No olvides que puede que sea un pequeño gesto en la remada el que te ayude a mejorar tu surf. Si no entras en todas las olas y además son olas que claramente son surfeables, estoy seguro de que es en la remada donde estás fallando.
La tecnica de la remada surf
Analiza cómo colocas la totalidad de tu brazo, antebrazo y mano. Esta ha de entrar en el agua de una forma suave procurando no salpicar demasiado, si salpica mucho es una clara señal de que lo estás haciendo mal. El momento de introducir la mano ha de ser hidrodinámico. Al extender el brazo debemos buscar la extensión total para aprovechar todo el recorrido subacuático. También es necesario que analices cómo posicionas los dedos de tu mano. Estos han de estar ligeramente abiertos, como si estuvieras agarrando una pelota de balonmano, de esta forma “agarraremos” mayor cantidad de agua y por lo tanto empujaremos con mayor fuerza.
El punto más importante es el siguiente: no se trata de buscar la profundidad si no de agarrar agua y tirar de ella hacia atrás, hacia nuestros pies, igual que si estuvieras trepando. La clave fundamental de la ramada es agarrar agua ligeramente por debajo de nuestro longboard.
Los fallos más comunes
Un fallo muy común también es el separar la remada hacia los laterales, nuevamente la remada ha de aplicarse por debajo de la tabla.
No es necesario extender el brazo hacia el fondo pero sí es importante introducir también el codo. De esta manera el antebrazo también aplicará resistencia durante la fase acuática nos ayudará a remar con mayor fuerza.
Durante la fase aérea el brazo ha de salir totalmente extendido y se mantendrá en está posición hasta que vuelva a tocar el agua. No es necesario hacer gestos incómodos flexionando igual que cuando nadamos a estilo crol ya que el hecho de ir remando sobre el longboard nos permite relajar la posición. Otro de los fallos que se suelen cometer es mover los brazos igual que si fuera un molino de agua, de forma circular, piensa que el brazo ha de salir extendido y durante la recuperación se desplazará rozando el agua.
Otro punto a tener en cuenta es que tu longboard ha de moverse lo menos posible hacia los cantos en el memento de la remada. Tu cabeza ha de estar firme y no deberá ondear de lado a lado en cada ramada. Intenta mantenerla firme y elevada, pero para no sobrecargar demasiado las cervicales procura no estar demasiado rígido.
En conclusión, piensa y analiza tu remada para modificarla y ayudarte a mejorar tu surf. De esta manera se volverá más efectiva y por tanto serás capaz de coger muchas más olas.
El surfing de cada uno se construye en un computo de muchas habilidades y aveces no podemos perder el norte con los primeros giros del surf y un sin fin de entrenamientos de surf fuera del agua. Para seguir mejorando tu técnica de surf es esencial prácticar lo máximo posible, por lo que necesitarás coger muchas olas y por tanto tu remada tiene que ser 100% efectiva!
